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Confrontaciones

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CRECIMIENTO PERSONAL / EMOCIONES

Confrontaciones

Esta mañana tuve un encuentro virtual. Este encuentro me hizo pensar en el acuerdo y la oposición. Pensé en las confrontaciones que se producen a diario por las diferencias de ideas y pensamientos.

Tengo que reconocer que la primera impresión fue pensar: ¡si no estás de acuerdo con mi opinión, pues por lo menos sé respetuosa en la forma en la que te diriges a mí con tus ideas!, y eso me provocó irritación.

Lo dejé estar junto a la tropa de razones que venían a calentarme la cabeza.

En un momento de silencio mental, surgió un pensamiento que despejó la confusión.

Ella argumentó su desacuerdo hablando de las consecuencias que podría traer la comparecencia de una persona (la cual yo había compartido en la red), ¡que podría perder su trabajo, su pensión y hasta ser vetado laboralmente al exponer sus ideas abiertamente!. No voy a entrar ni en los argumentos del señor en cuestión ni en los de la señora replicante, porque esta reflexión no es para debatir entre correcto e incorrecto según pareceres, va de amorocidad, de respeto, de incluir la forma de ver del otro para ver donde colisiona con mi propia forma de ver y abrazar las diferencias. De esta manera me doy la oportunidad de reconocer mis propios debates internos, al juez que con su mazo machaca lo que no puedo comprender, al justiciero que toma su causa como una justificación para enfrentar a otros y al sumiso que calla lo que piensa por miedo a encontrarse con el juez y el justiciero del de enfrente.

El contenido es lo de menos, no es una lucha para convencer, es una llamarada que sale de las entrañas que nos habla de intransigencia y vanidad.

La olla a presión social, política y económica que estamos viviendo son el caldo de cultivo perfecto para descubrirnos vulnerables y poderosos, sensibles y fuertes, pacientes y valientes, unidos y libres.

Es una oportunidad maravillosa de reconocernos, observando cómo lo que nos agita por dentro ilumina lo que ocultamos en la sombra del inconsciente.

Gracias infinitas a la mujer que me sacudió esta mañana. Es un regalo poder experimentar la paz que surge cuando integro a los opuestos en mí.

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